El Test de Compatibilidad Genética es una innovadora técnica que nos permite minimizar la transmisión de enfermedades genéticas a nuestros hijos. En la actualidad, se conocen unas 7000 enfermedades causadas por la alteración de genes concretos. 1 de cada 100 nacidos presenta una de estas enfermedades.
1 de cada 100 nacidos presenta alguna enfermedad genética. Con el TCG podemos detectar hasta 600 enfermedades.
Las enfermedades genéticas no se pueden curar, pero sí se pueden prevenir con el TCG.
Todos tenemos alteraciones en nuestros genes y con el TCG podemos saber si éstas podrían causar una enfermedad a nuestros hijos. Se recomienda hacer el test en los siguientes casos.
Antes de un tratamiento de reproducción asistida: Es aconsejable para conocer el riesgo de transmisión y poder determinar el mejor tipo de tratamiento en cada caso.
Antes de un tratamiento con óvulo o semen de donante: Para poder seleccionar un donante que no sea portador de la misma mutación que el miembro de la pareja que aporta los gametos (óvulos o espermatozoides) realizamos el test a todos nuestros donantes.
Antes de intentar por medios naturales un embarazo: Cualquier mujer que quiera quedarse embarazada para conocer el riesgo de poder transmitir posibles enfermedades a su hijo.
El 90% de los pacientes que siguen un tratamiento de reproducción en el Grupo IVI quedan embarazados.
IVI ofrece atención personalizada y acompañamiento en todas las fases del tratamiento.
IVI es pionero gracias a que usa la última tecnología de reproducción asistida para ofrecer los mejores resultados.
En IVI somos la que más alternativas de tratamiento ofrecemos para lograr resultados.
El análisis lo realizamos a partir del ADN obtenido de una muestra de sangre del padre y de la madre y en un mes tendremos los resultados y podremos saber la probabilidad de que tu hijo sufra alguna enfermedad.
Porque reduciría el riesgo teórico de tener descendencia afectada de cualquiera de estas enfermedades genéticas de 1 de cada 100 a 1 de cada 30.000 aproximadamente. Las enfermedades genéticas no se pueden curar, pero sí se pueden prevenir con el TCG. Cada año, muchas madres y padres se ven sorprendidos por el nacimiento de un bebé con algún tipo de enfermedad genética. Esto ocurre porque para que se manifieste la enfermedad el niño tiene que heredar una copia alterada del padre y una copia alterada de la madre. Al tener los padres sólo 1 copia de la mutación, son portadores, pero personas sanas.
El objetivo principal de IVI es que sus pacientes logren tener hijos sanos.
Cuando se detecta alguna mutación en un miembro de la pareja, no sucede nada, a menos que el otro miembro de la pareja tenga una mutación en el mismo gen. En ese caso existe un elevado riesgo de tener descendencia con esa enfermedad.
En este caso, las opciones para concebir un hijo libre de esa enfermedad son: